Tres poemas de mi libro, CERO.

XXIX

Sólo nombrar al viento

nos libera y nos alza

sobre la piel del mundo,

sobre nosotros mismos.

Somos huellas del tiempo,

luz y sombra que pasa

por los campos sin rumbo

trazando los caminos.

Sólo nombrar al viento

nos libera y da alas.        

XXXII

Vagan por los andenes

perdidos en el vértigo

de la prisa, ahogados

por el grito salvaje

de la urbe. Son cual títeres

movidos por los hilos

del poder que en sus manos

mantienen los imperios.

LXX

Nada de estas criaturas

-líneas de mis miedos-              

que van por la escritura  

disfrazadas de versos

y al fin solo son dudas

que me llevan al CERO.

Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.